DERIVAS, RAFAEL GUZMÁN
Rafael Guzmán, izquierda, junto a un responsable del museo.
Lo sabíamos: caminar no es para llegar a un punto concreto. La meta suele devolvernos al principio, un poco a la DERIVA, al lugar exacto donde lo iniciamos.
Mirar
Aprender
Reflexionar
Amar
Crear....
Y al principio era el hombre, un hombre con los brazos abiertos, el tronco erguido. Era una cruz, era un Cristo crucificado que se había empapado del mundo y el mundo guiaba sus pasos, siempre a la DERIVA.
Rafael Guzmán se ha dejado llevar por esos caminos, ignotos, de los que se ha apropiado. Los ha hecho suyos para demostrarnos que el viaje, por muy lejano y remoto que nos parezca siempre concluye en nuestro interior, para ser procesado de forma intelectual y artística. Y siempre a la DERIVA, como son los propios desplazamientos, el tiempo que empleamos y el lenguaje en el que nos desenvolvemos.
Del 22 de Enero al 22 de Febrero
Museo y Biblioteca Pública
Zamora