Sunday, November 30, 2008

Claudio Rodríguez, lo local y lo universal





Se han celebrado en Zamora las III Jornadas sobre el insigne poeta zamorano, Claudio Rodríguez. A la cita no faltaron amigos, paisanos, poetas e intelectuales locales. Tampoco faltaron, como cabía esperar, los especialistas en la obra de Claudio invitados a las jonadas como: Francisco Brines, Dionisio Cañas, Chantal Maillard, Jaime Siles o Tomás Sánchez Santiago, entre otros.

Hubo momentos de gran emoción como en la intervención de Chantal Maillard que, mientras recitaba sus propios versos, se le estranguló la voz y calló momentáneamente, para volver, una vez recuperada de la carga sentimental que la dominaba.

Memorable la intervención de Dionisio Cañas, quién no sólo nos obsequió con sus palabras sino con imágenes inéditas de cuando Claudio y su esposa pasaron unos días en Nueva York y disfrutó de aquélla estancia en la ciudad de los rascacielos con la pareja.

Cada cual fue desmenuzando, casi verso a verso, las particularidades sobre la obra del poeta zamorano en la que todos concluyen alabando la madurez, tan temprana, para elaborar sus versos.

Los asistentes disfrutaron de la sapiencia de los ponentes y aprendieron, cómo no, a conocer más al poeta, al que la LUZ fue senda abierta en su trayectoria creadora. Porque la claridad puede venir del cielo, pero también de los destellos que, la misma, incide sobre los rascacielos de Manhatan.

Para terminar y como exquisita guinda, otro zamorano universal, Agustín García Calvo, invitado también y casi obligado, según sus propia palabras, por mor de los buenos amigos que tiene en Zamora y que insistieron en su presencia.

La conferencia de Agustín, "Contra la poesía". Nada menos. Y nada más. Su discurso fue seguido por el auditorio, abarratodado para el momento, curioso y expectante porque quienes conocen a Agustín saben que se va a salir por la tangente porque, fiel a su filosofía, se muestra en contra de lo establecido, del Poder, de quienes lo dirigen, de quienes lo acatan sin rechistar y de la imparable marcha que la sociedad sigue, absurda y pacata, obtusa y "mendicante". Amén.

Aconsejó Agustín: "No escribir poesía, no hacerse poeta, porque la poesía hay que cogerla en el aire, hay que sentirla. Contribuir a romper la fe en el capital establecido". Concluyó diciendo que "la inmortalidad es la muerte".

AMÉN.

Tuesday, November 25, 2008

JESÚS MOLINA (1903-1968)








La Galería Espacio 36 exhibe, en estos días, la obra de Jesús Molina, zamorano ilustre, nacido en Cerecinos de Campos, como Baltasar Lobo y que se fue defitivamente hace cuarenta años. Casi nada. Un artista clásico que lleva al espectador al misticismo cuando se contempla, por ejemplo, el cuadro de esa "Piedad" con su hijo muerto, acompañada de seis dolidas mujeres que recuerdan a las lorquianas hijas de Bernarda Alba. El cuadro es el canto dolorido de una trise época, ya extinta.

En contraposición, nos sorprende la mirada de la mujer con mantilla blanca, la cual da un salto en el tiempo y nos transporta a una época romántica y de emergencia.

Jesús Molina, sin duda, ha sido uno de los artistas figurativos españoles más importantes del siglo XX. Dicen de él que fue el juez más severo con su propia obra. Era perfeccionista, un gran dibujante, como se aprecia en la mujer con las manos cruzadas y con moño lateral, y que nos recuerda a las mujeres que pintara Julio Romero de Torres.

La inauguración de esta muestra, reunió en la sala a la familia del pintor, emocionada y agradecida por vivir estos momentos donde se rinde tan sentido homenaje al artista de Cerecinos, así como a numerosos amigos y curiosos para conocer la obra de Molina.

La muestra, sin duda, resulta un compendio de estilos y épocas en la vida del artista, muy interesante, que nos habla de su gran sensibilidad para captar el mundo que le rodeaba así como la exigencia para consigo mismo al realizar su trabajo.

Galería Espacio 36 (Zamora)
Hasta el 13 de Diciembre
www.espacio36.net