Monday, June 24, 2019

70 Aniversario de la Asociación zamorana de la Música "BELLAS ARTES"

Con gran brillantez, la Asociación Zamorana de la Música, celebró el último concierto de la temporada, coincidente con los 70 años de su fundación. Desde entonces han sido muchos conciertos, muchos proyectos conseguidos, muchas personas implicadas para que una organización que vive y se desvive para la música haya llegado hasta aquí, consiguiendo que muchos zamoranos hayan podido disfrutar y aprender de la música y con la música, porque nada más bello que escuchar y atender lo que emana de cada pieza, de cada sinfonía, para educar nuestro oído y potenciar nuestra sensibilidad. El pasado 21 de junio, en el auditorio de "La Marina" Fundos de Zamora, la Orquesta Filarmónica Ibérica deleitó a un público ávido y entusiasta con un programa que, para la ocasión, eligió música de películas, bandas sonoras que nos han llevado a los espectadores a vivir apasionados momentos de cine por los que hemos podido disfrutar de historias emocionantes como "La lista de Schindler", "Indiana Jones", "ET" o "El golpe" entre otras muchas, que hicieron que el concierto, el gran concierto, se prolongara durante casi tres horas que, a muchos, le supieron a poco. El director de la orquesta, Melani Mestre que, al tiempo, interpretaba al piano, demostró gran entusiasmo desde el primero momento y agradeció la invitación de la Asociación por haber decidido que el programa fuera sobre bandas sonoras. La complicidad entre el público y la orquesta fue patente desde el primer instante, incluso aún interpretando piezas desconocidas como una japonesa que logró introducir en el oído del espectador ese mantra entre espiritual y oriental que tanto atrae al público occidental. La Orquesta Filarmónica Ibérica ha sido formada mediante un proceso minucioso de selección entre músicos recién salidos de los principales Conservatorios europeos y de Estados Unidos. La tradición musical Centroeuropa estuvo muy presente entre los 23 músicos que componen la orquesta. Su profesionalidad, equilibrio y buen hacer, llegaban al espectador mientras sonaba la música de Williams, Zimmer, Manccini, Cugat o Piazzola. Y así, cerrando los ojos nos llegaban imágenes de esas legendarias películas que nos llevan a bosques inverosímiles, a paseos cubiertos de álamos otoñales, al murmullo de la vida que nos han mostrado tantas imágenes de la mano de tan excelentes compositores. Sin duda fue un concierto mágico porque hizo que los sentidos, no sólo el del oído, estuvieran alertas. EL concierto nos despertó lo más sensible que genera nuestro interior cuando ese estado de bienestar se alía con el alma. Bellísima, cómo no, la interpretación de la violinista Natalia Borysyuk, como la delicadeza del director-pianista, Melani Mestre, reconocido como uno de los músicos virtuosos de la élite mundial. Fue heredero de la Tradición Pianística de Enrique Granados y de Alicia de Larrocha. Son muchos los premios y las distinciones obtenidas por este pianista a lo largo de su dilatada carrera. Recientemente acaba de realizar como solista la primera grabación de los Conciertos para piano y orquesta de Manuel Narro, José Palomino y Mariana Martínez. Pese a su juventud ha conseguido un puesto de gran relevancia en el panorama internacional. Con tan solo 25 años entró a formar parte de la Cátedra de Piano de la Escuela Superior de Música de Cataluña. En la actualidad es miembro de la Sociedad Española de Musicología.