Pintura napolitana

Antonio Joli
Fernando IV a caballo con su Corte


José de Ribera, (El Españoleto)
San Sebastián




Un total de 53 pinturas procedentes del Museo de Capodimonte se encuentran expuestas en el Palacio Real de Madrid, habiendo sido seleccionadas por el director y comisario de la muestra, Nicola Spinosa.

El legado cultural de la antigüedad grecolatina, junto a miembros de la monarquía, nobleza y diferentes ámbitos españoles que vivieron en Nápoles, contribuyeron a estrechar lazos culturales y políticos con España a lo largo de los siglos.

El Museo de Capodimonte tiene sus orígenes en la colección de arte de la familia Farnesio, una de las más poderosas de Italia del siglo XVI. Mucho después, Carlos III de España amplió la colección y la situó en la colina de Capodimonte.

La sobriedad y la belleza se han unido para hacer que la muestra sea una visita obligada para los amantes de las pinacotecas y para recrearse con la visión de las diferentes estancias del Palacio Real de Madrid.

La muestra se puede ver hasta el 10 de diciembre.

Fernado Lozano Bordell

"Siempre la claridad viene del cielo"
-Claudio dixit-
y del agua derramada entre los dedos del artista.

Siempre la luz como premisa imprescindible, como seña de identidad.

Y siempre la naturaleza abatida por el caudal, aniquilando, derrumbando lo que toca para ser transformada milagrosamente con trazo firme, minucioso, tibio, cálido. Para convertirse en explosión de luz.

El artista convierte el barro en finos hilos de medida precisa, milimetrica, inverosímilmente perfectos, guardando un equilibrio extraño que dejan la mirada soñadora.

Maravillosas y luminosas las acuarelas de Fernando.

GALERIA ESPACIO 36 -ZAMORA-
Hasta el 30 de Noviembre.

Juan Carlos Matilla

De tierra y agua




Porque de la raíz la esencia y de la sed el agua, el hombre busca el alimento que le ata a la naturaleza.

Matilla se aferra a la naturaleza y se deja atar. El nexo son sus pinceladas, ágil bruma de cromatismo suave donde despierta cada estación del año.

Dicen de él que "es pintor por naturaleza" y además en un artista de la naturaleza.

Toresano de nacimiento, se deja influir por los maestros locales. Raíces invernales que nos recuerdan a las de Mezquita o a la frescura de Enrique Reche.

Realismo o impresionismo. Da igual. La magia de su trabajo hoy se puede contemplar en la Galería Espacio 36 de Zamora.

Hasta el 16 de Noviembre.

Luís Quico

Foto retrospectiva de Luis Quico, a la derecha, con el poeta Claudio Rodríguez ya fallecido.



Antes de que sea demasiado tarde quiero rendir este pequeño homenaje a Luis Quico, este artista zamorano que lo mismo hace vidrieras para iglesias y catedrales que murales de diminutos mosaicos, o concibe a la Gioconda como a él le da la gana, dibuja las más inteligentes caricaturas o trabaja el bronce, el barro o la madera de forma magistral para crear sus esculturas. Inventor imaginativo y creador nato no exagero nada cuando afirmo que me hace recordar al propio Leonardo.

De suaves rizos su melena, perfectamente estudiada. Su bigote airoso y descarado recuerda al de Dalí. Dandy y provocador. Sobre su piel siempre la seda o el algodón, siempre tejidos nobles, andinos o de Sayago, le da igual. Los lazos, los pañuelos, las cintas de terciopelo o de cuero, adornando su cuello. Patente de Luis Quico. O de corso, quién sabe. Siempre impecable Luís.

Antes de que sea demasiado tarde para que puedas reconocer el tono de mi voz y tus ojos me digan algo cuando me veas, he de ir a verte para abrazarte.

Un beso muy fuerte amigo. Hasta mañana.