Fernando Pennetier

Vuelve Pennetier a la Galería Espacio 36 y vuelve con sus bodegones impregnados de niebla, para hacernos la ilusión de que esos membrillos que ilustran sus cuadros han sido robados a esos membrillos que crecen libres junto al Duero. Como esas uvas preñadas de zumo que, al mirarlas, despiertan la sed.

Pennetier impregna a sus obras de un halo misterioso, pero también consigue aportarles naturalidad. Las dulcifica, como si se miraran a través de un visillo o de un cristal mate. Pennetier es fiel a sí mismo, es un perfeccionista del trazo, de los volúmenes discretos, de la minuciosidad para solucionar los mínimos pliegues de las telas, como la del mantel. Pennetier es un mago con el color, en cualquiera de los temas tratados.

Galería Espacio 36
Zamora
Hasta el 18 de Diciembre
www.espacio36.net